Por qué su almacén debería ser adaptable

Con la creciente popularidad del comercio electrónico y la proliferación de los servicios de entrega a pedido en los últimos años, la "adaptabilidad" se ha convertido en una palabra de moda en la industria de los almacenes y depósitos. Entonces, ¿qué significa exactamente ser adaptable?

Los almacenes adaptables son dinámicos y están en constante evolución. Pueden manejar las demandas de los clientes y la llegada de un gran número de nuevos artículos. Por ejemplo, cuando un nuevo producto se vende mucho mejor de lo esperado, un almacén adaptable será capaz de cambiar sus necesidades comerciales, en lugar de limitarse a reaccionar a los pedidos individuales.

Cambiar el paisaje de la entrega

Los almacenes adaptables se mantienen flexibles hasta el punto en que son capaces de adaptarse a un cambio en la demanda de los clientes, ya sea repentino y drástico o que ocurra gradualmente a lo largo del tiempo. Están listos para manejar cualquier escenario. El personal de los almacenes debe estar en sintonía para que cuando se produzca un aumento brusco de la demanda de productos, por ejemplo, el flujo de trabajo siga funcionando sin problemas y ningún empleado se vea abrumado. Como en prácticamente cualquier lugar de trabajo, la comunicación efectiva entre los supervisores y los empleados de un almacén es vital.

También es fundamental para el éxito de un taller adaptable el almacenamiento y la forma en que se instala. Todos los almacenes tienen estanterías de paletas y estantes, pero la verdadera adaptabilidad depende de la capacidad de un almacén para almacenar - y recuperar - cualquier artículo que se necesite y cuando sea necesario. En la era de la gratificación instantánea de Amazon Prime y del envío rápido como un rayo, los clientes se han acostumbrado a esperar que sus productos sean entregados en su puerta a los pocos días de hacer el pedido. Un almacén adaptable ayudará a mejorar la velocidad y la ineficiencia en la que estos productos se mueven dentro y fuera para su entrega y, a su vez, mantener a los clientes satisfechos.

Maximice su espacio

Antes de pensar en ampliar el tamaño de su almacén, lo que a menudo resulta costoso y lleva mucho tiempo, considere la posibilidad de desarrollar un plano de planta que maximice cada centímetro cuadrado de espacio que ya tiene. Tener un almacén bien organizado que haga un excelente uso de su espacio de suelo puede reducir drásticamente el tiempo necesario entre la iniciación y la implementación. Considere la posibilidad de instalar armarios modulares y tipos de estanterías personalizables, como estanterías de acero y de alambre. Estos armarios y estanterías pueden reajustarse tanto y tan a menudo como sea necesario para adaptarse a las necesidades de su inventario, asegurando que los artículos de venta en caliente estén siempre a mano.

No te olvides de aprovechar el espacio vertical, también. Al almacenar verticalmente en lugar de horizontalmente, se aprovecha mejor el espacio y se libera espacio para otros fines. La utilización del cubo vertical incluye el espacio por encima de los artículos almacenados, la altura total del edificio, los pasillos transversales y más. La utilización del cubo incluye métodos como el apilamiento, el almacenamiento en estanterías y un sistema de almacenamiento y recuperación automatizado (ASRS).

Los dispositivos de elevación y manipulación cautiva y los sistemas de estanterías de paletas utilizan paletas ajustables y desmontables y ayudan a almacenar verticalmente artículos voluminosos y pesados. Estos dispositivos pueden reducir la dependencia de las carretillas elevadoras, lo que conduce a un espacio de trabajo más seguro en el suelo, así como a una reducción de los requisitos de espacio en los pasillos que los necesarios para una carretilla elevadora tradicional.

Mantener las cosas funcionando sin problemas

La posibilidad de recuperar productos para pedidos expeditivos es esencial para la adaptabilidad y puede requerir cierta reubicación de los productos para eliminar las demoras y mantener los indicadores clave de rendimiento (KPI). Asegúrese de tener suficiente personal de almacén para mantener sus operaciones funcionando sin problemas, incluso frente a la creciente demanda de productos. Además, evite comprometerse demasiado en lo que respecta a las fechas y velocidades de entrega.

Las necesidades de la empresa cambiarán inevitablemente con el tiempo, a veces de forma repentina cuando menos se lo espera. Lo que pudo haber funcionado para su almacén hace cinco años, puede que no funcione hoy en día. Es importante auditar cómo funciona su almacén cada año, actualizando las existencias y lo que puede haber desaparecido. Evalúe qué cambios deben hacerse para que su almacén sea más adaptable y, en última instancia, funcione de manera más eficiente.

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